El Hombre Light (una vida sin valores), es una obra escrita por Enrique Rojas. Muy bien se afirma en la introducción del libro que en los últimos años ha surgido un nuevo tipo humano en la sociedad occidental del bienestar: El hombre Light. Se trata de un ser hedonista y materialista cuya única meta en la vida consiste en alcanzar el éxito; un ser al que sólo le interesa el dinero y el consumo. En definitiva, un hombre infeliz e inseguro, vulnerable e indiferente por saturación, que ha hecho de la permisividad su nuevo código ético y que va desde la tolerancia ilimitada a la revolución sin finalidad.
Los maestros que hoy batallamos con diversas conductas muchas veces inexplicables de nuestros alumnos, necesitamos estar informados sobre los nuevos comportamientos de nuestros jóvenes producto de la influencia de este nuevo tipo humano en la sociedad actual. Por este motivo, haré llegar en este y los próximos boletines algunos alcances sobre esta importante obra.
Enrique Rojas, en el capítulo que trata sobre el perfil psicológico del hombre Light manifiesta que en las conquistas técnicas y científicas -impensables hace tan sólo unos años- nos han traído unos logros evidentes: la revolución informática, los avances de la ciencia en sus diversos aspectos, un orden social más justo y perfecto, la preocupación operativa sobre los derechos humanos, la democratización de tantos países y la caída en bloque del comunismo. Pero frente a todo ello hay que poner sobre el tapete aspectos de la realidad que funcionan mal y que muestran la otra cara de la moneda:
- Materialismo.- Hace que un individuo tenga cierto reconocimiento social por el único hecho de ganar mucho dinero.
- Hedonismo.- El nuevo código de comportamiento, “pasarlo bien a costa de lo que sea”, lo que apunta hacia la muerte de los ideales, el vacío de sentido y la búsqueda de una serie de sensaciones cada más nuevas y excitantes.
- Permisividad.- Arrasa los mejores propósitos e ideales.
- Revolución sin finalidad y sin programa.- La ética permisiva sustituye a la moral, lo cual engendra un desconcierto generalizado.
- Relativismo.- Todo es relativo, con lo que se cae en la absolutización de lo relativo; brotan así unas reglas presididas por la subjetividad.
- Consumismo.- Representa la fórmula posmoderna de la libertad.
“El hombre Light es frío, no cree en casi nada, sus opiniones cambian rápidamente y ha desertado de los valores trascendentes. Por eso se ha ido volviendo cada vez más vulnerable; por eso ha ido cayendo en una cierta indefensión. De este modo, resulta más fácil manipularlo, llevarlo de acá para allá, pero todo sin demasiada pasión. Se han hecho muchas concesiones sobre cuestiones esenciales, y los retos y esfuerzos ya no apuntan hacia la formación de un individuo más humano, culto y espiritual, sino hacia la búsqueda del placer y el bienestar a toda costa, además del dinero.