“Ámate y se feliz”. A todos nos hace mucho bien el sentirnos afirmados sobre nosotros mismos. Cuánto más autoestima tengamos, habrá más felicidad y mejorarán nuestras relaciones con los demás. ¿Cómo desarrollamos la autoestima?:
- Recibiendo reconocimiento y afecto de los demás: padres, familiares, profesores, compañeros, amistades…
- A través de la propia autovaloración. A medida que vamos creciendo dependemos menos de la opinión y apoyo de los demás. Vamos aprendiendo progresivamente a autoafirmarnos nosotros mismos.
Para ello hay que:
- Pensar positivamente acerca de nosotros mismos. La educación que se nos ha dado muchas veces en la familia, en la escuela, ha insistido demasiado en nuestros defectos y en nuestros puntos débiles.
- Debemos estar dispuestos a perdonarnos a nosotros mismos, más que a culpabilizarnos.
- Descubrir nuestras potencialidades (intelectuales, físicas, afectivas, religiosas, sociales..) y dinamizarlas.